miércoles, 6 de octubre de 2010

Mi tributo a Don Webster

Trabajador en una plataforma marítima dedicada a la extracción y procesamiento del petroleo al oeste de Estados Unidos, es una de las pocas personas de este país que merecen la pena. O al menos, la merecía.

Hoy ha muerto de un derrame cerebral y me siento compungido por tal natural suceso, así que subiré uno de sus escritos cortos (porque los largos son demasiado extensos) está traducido al español y no os costará mucho encontrar más de este genial ser. Vivió largas temporadas solo, sin compañía, no tenía más que una abuela y una nieta, fue un hombre solitario, nunca se apreció su arte y se perdió a un posible genio en la inmensidad del mar. Acompaño su escrito de un verso de "Que Dios me coja confesándome" porque creo que, una persona que después del largo periodo que pasó solo, no acabar creyendo en dioses y seguir el ateísmo a rajatabla tiene mucho mérito.


Giré la enorme rueda para cortar el gas, entonces me quedé mirando la luna algún tiempo, era pues, el único testigo de mi vida, era pues, el único compañero de viaje que había sobrevivido a todas mis locuras y ahora me miraba impasible mientras se marchaba poco a poco de mi lado una vez más.

Caminé por la plataforma mojada, apoyando mis guantes ajustados de goma mojada contra el óxido que me impedía caer en el abismo de lágrimas. Las botas me hacían daño, pero era un daño del que gustaba en aquel momento, tenía esa sensación de que a más dolor, mas alivio sentiría al quitármelas.

Llegué a ese barco ya cansado de navegar, caminando despacio mientras las olas querían echarme de su hogar, crucé la inestable rampa de madera, que cual puerta del destino me esperaba cada día, tan inerte como siempre, como toda esta vida artificial que me tenía atrapado y no me dejaba respirar por mí mismo.

Me senté y con el vaivén del barco pensé en despertar para siempre.


---
Como osáis creeros valientes, de coraje llenos
Si tenéis temores y pensamientos obscenos.
si como una prostituta se arrodilla ante un
cliente porque sabe que de él es menos.
Vosotros os arrodilláis ante vuestros miedos
y rogáis que el señor os tenga en su seno.

domingo, 3 de octubre de 2010

Tormentos

Los satanistas, los góticos y hasta los heavys tenemos fama de ser tranquilos, muy pacíficos hasta que cae la noche y salimos como vampiros en época de vacas flacas a desgarrar carne y a alimentarnos de sangre y sufrimiento. Cualquiera que se encuentre descrito de una forma muy general en los tres adjetivos de ahí arriba; sabrá a lo que me refiero.

La filosofía no es exactamente así, si bien cada persona es diferente y todas son iguales; los instintos básicos se reproducen en cualquiera, por no mencionar que hay distintos grupos de personas, cada persona tiene unas características psicológicas, no sería difícil encontrar a cientos o incluso miles de coincidencias; osease personas psicológicamente reproducidas con una exactitud apasionante.
Aquí entra en juego la música, las influencias, las experiencias vitales, todo es un cóctel que te cambia de por vida, te marca cual estigma y te deja perplejo ante los recuerdos, analizar o llegar a comprender los cambios es muy difícil, pero sencillamente bello.

Se podría decir, que los satanistas son diferentes entre ellos, pero la filosofía de vida suele ser parecida, es por eso que ante situaciones similares, las reacciones no varían demasiado; la vida está llena de problemas, de gente que vive del sufrimiento ajeno, de parásitos, de personas que inconscientes al poder o influencia de los que son poseedores, avanzan en la vida destruyendo a otros sin intencionalidad manifiesta.
Lo que el satanismo acoge en su doctrina se podría resumir en esta célebre frase:

"Si tus problemas tienen solución, ¿De qué te preocupas?; Si no la tienen: ¿Para qué te preocupas?"

No hay más en la vida que la paciencia y la confianza en uno mismo. Por lo general, hay que tomarse las cosas con calma, actuar pensando siempre un par de veces la teoría antes de pasar a la práctica, arriesgar siempre que la recompensa pueda merecer la pena, confiar en que no hay nadie más o mejor que tú y dejar tu sello personal en cada situación, ser como una roca impermeable, que nada te afecte, no mostrar sentimientos y luchar contra lo que venga con una determinación, crueldad y fuerza impecables. Una de las cosas principales en el satanismo es no meterse en líos, no atacar a nadie sin razón pero, si te atacan, devolver el golpe multiplicando por diez la fuerza a la que lo recibiste. Como he visto que hay gente muy pintoresca y singular que sigue este pequeño blog, pondré ejemplos de todo lo que pueda para sintetizar y graficar lo que quiero transmitir.

-Me ha dejado mi novio/a: Una persona que te es infiel no merece la pena, es basura. La fidelidad es algo que, en el amor y en casi cualquier cosa, vale más que cualquier otra aptitud. Si alguien te convence de que te ama, y al poco tiempo este sentimiento cambia, estás de enhorabuena: Una relación inestable, cuanto antes se rompa, mucho mejor: ¿merece la pena vivir con el corazón en un puño? que alguien rompa una relación de dependencia contigo es algo bastante más positivo. Siempre se encuentra a alguien, mejores los hay a miles, peores a millones; pero hay más. Llévate lo positivo, lo que has aprendido para así evitar problemas en otra pareja.
Por último, por muy mala que sea la situación; olvídale, hazle sentir que nunca te importó. Porque en un mes, dos o hasta tres; con muy poca fuerza de voluntad y algún amigo o amiga, estarás mejor que nunca, más sabio, fuerte y con mucha experiencia, contento de que tu tuviste algo especial que no todos pueden tener.

-Estoy agobiado, el dinero escasea: Lo material no importa nada. Es el arma que tienen los ricos, los mafiosos y la gentuza contra ti. Si lo ridiculizas y aprendes a vivir con lo justo, los ricos dejan de ser gente importante y pasan a ser gente corrupta, tú estarás tan por encima que incluso deberías acercarte a un rico y darle un abrazo, decirle que su vida siempre será una miseria, nunca estará seguro de si le aman o valoran por quien es o por su dinero. Siempre querrá más, se meterá en líos fiscales y nunca vivirá seguro porque la codicia hace que muchos quieran robarle, la envidia, matarle. ¿Qué vida es esta?
No está tan mal vivir con lo justo, se madura y el ingenio se agudiza, además, si estudias mucho o tienes un golpe de suerte, nadarás en abundancia de aquí a, como mucho, diez años.

-Los estudios me van mal: ¿Qué puedo decir? nadie se casa con una compañera de la infancia, los amigos de esta, quedan atrás en su mayoría. Así que es mejor no desarrollarse demasiado socialmente, sino, trabajar y estudiar; pedir ayuda a tus responsables y conseguir ser alguien formado. No hay que dejar de lado las relaciones sociales, pero en una escala de prioridades, la cultivación personal está demasiado arriba como para cansarse a medio camino.

-El trabajo apesta: Sí, de eso no hay duda alguna. Poca gente trabaja de lo que el gusta, y cuando el placer se convierte en obligación ya no es placer. Por lo tanto, hay que intentar cambiar cosas, ascender, cambiar de trabajo, relacionarse con los compañeros; introducir dinamismo para que no sea tan míseramente repetitivo como de costumbre.